En un departamento, la cocina y los dormitorios, son las habitaciones en donde, por lo general, encontramos muebles de melamina, ya que es un material popular, duradero y fácil de limpiar.
Sin embargo, a pesar de que es resistente a la humedad y las manchas, todavía requiere cuidado y atención para mantener su aspecto y funcionalidad a largo plazo.
En este artículo, Óptima Inmobiliaria te explica cómo limpiar muebles de melamina para que puedas mantenerlos en excelentes condiciones.
Paso 1: Limpieza diaria
La limpieza diaria es esencial para mantener tus muebles de melamina en buenas condiciones. Para ello, utiliza un paño suave y limpio, preferiblemente de microfibra, y pásalo suavemente sobre la superficie para eliminar el polvo y las partículas de suciedad.
Si es necesario, puedes humedecer el paño con agua tibia para eliminar las manchas y la suciedad más persistentes.
Paso 2: Limpiar manchas y suciedad persistente
Si las manchas no se eliminan con un paño húmedo, es posible que necesites utilizar un limpiador suave. Puedes comprar un limpiador específico para melamina o crear tu propia solución casera mezclando agua tibia y un poco de detergente suave para platos.
Aplica el limpiador con un paño suave y húmedo, y frota suavemente la superficie en movimientos circulares.
Asegúrate de no frotar con demasiada fuerza, ya que esto puede dañar la superficie. Después, aclara el paño y utilízalo para eliminar cualquier residuo de limpiador. Finalmente, seca la superficie con un paño seco y limpio.
Paso 3: Eliminar rayones y marcas
Los muebles de melamina pueden rayarse fácilmente, especialmente si se utilizan productos abrasivos o se colocan objetos pesados sobre la superficie.
Si tienes rayones o marcas en tu mueble de melamina, puedes utilizar un lápiz corrector para cubrirlos. Si los rayones son más profundos, es posible que necesites utilizar un rellenador de rayones para cubrirlos y repararlos.
Paso 4: Proteger la superficie
Para evitar rayones y manchas en tus muebles de melamina, es importante utilizar protectores de superficie. Por ejemplo, puedes utilizar manteles individuales para proteger la superficie de la mesa, y colocar almohadillas en los pies de las sillas y mesas para evitar rayones en el suelo.
Ahora ya lo sabes, siempre hay formas de cuidar nuestros muebles de melamina para una mayor durabilidad.
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