Los fondos de inversión inmobiliaria han sido por años el aliado de las personas que buscan invertir en distintos tipos de inmuebles, estamos hablando desde la compra de grandes propiedades residenciales, hasta propiedades comerciales.
Sin embargo, tras una pandemia, cambios políticos en el Perú y un desequilibrio en la economía mundial, los fondos de inversión han tomado sus precauciones.
¿Cuál es el nuevo enfoque?
La estrategia de los fondos de inversión en los proyectos de desarrollo inmobiliario en Perú ha cambiado de rumbo.
El presidente del comité de Análisis de mercado de la Asociación de empresas inmobiliarias (ASEI), Ricardo Arbulú, declaró que algunos de estos fondos inmobiliarios, ya han optado por un enfoque en proyectos no mayores a 120 departamentos, en su lugar, se han focalizado en pequeños proyectos que no conlleven un largo ciclo de producción.
¿A qué se debe esto?
Según el señor Arbulú, se debe al riesgo político al que se exponen, entre ellos, los cambios en el Congreso o el Gobierno, en especial, considerando las circunstancias en la que se encuentra el país actualmente.
De esta manera, los proyectos que su desarrollo dure no más de 5 años se han convertido en el principal nicho para invertir.
Los riesgos se volvieron mayores, debido al alza de tasas de interés a nivel mundial, afectando a la economía y causando la volatilidad en los mercados. Como consecuencia, los fondos tomaron sus precauciones en sus inversiones inmobiliarias, destacó Álvaro Valdivia, gerente de Fondos Inmobiliario Capital SAF.
También comentó, que la pandemia ya había ocasionado que los fondos de inversión se vuelvan más cautos, a ello se le sumó el conflicto político interno y ahora un problema aún más grave y a nivel mundial, el riesgo en la economía.
Esta decisión de ser más precavido que orilló a tomar proyectos de corta duración comentada por ASEI fue secundada por El Poder Ejecutivo. Particularmente cuando la venta de inmuebles es afectada de manera directa por la elevación en las tasas de los créditos hipotecarios.
El diario Gestión acotó que la industria de la construcción tiene expectativas pesimistas en materia de inversión, mientras que la industria inmobiliaria aún es imán para nuevos proyectos.
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